Triste es tener que dejar de hacer cosas por miedo a la reacción de los demás.
Tener que vivir en una sociedad dónde parece que para ser feliz, se necesita la aceptación de 4 pela gatos. Como si fuesen ellos quiénes saben que es lo que te hace feliz. Y la verdad es que no tienen ni idea.
Parece ser que la persona perfecta es aquella donde no tiene personalidad ni derechos a elegir a quién querer ni que hacer con su vida, porque lo correcto es que alguien te diga como tienes que ser para que no te rechacen y no hablen mal de ti porque no correspondes a unos ciertos patrones. Y si te das cuenta, es ridículo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario